Para la mayoría de las empresas, el modelo tradicional de hacer negocios es simple: crear un gran producto, enviarlo y olvidarse de él. Sin embargo, para una empresa como BioBee, cuyas soluciones son a partes iguales conocimiento, experiencia y soluciones innovadoras, el producto no puede simplemente olvidarse una vez que sale al mercado.
BioBee se ha esforzado mucho para asegurarse de tener presencia física en todos los países donde comercializa sus soluciones de manejo integrado de plagas. Al establecer una gran cantidad de subsidiarias en los países de sus mercados, BioBee garantiza que sus productos sean implementados por expertos con conocimientos, pero que aprendan a navegar los desafíos únicos que presenta cada nuevo panorama. Y ahora, por primera vez, BioBee ha traído a toda la familia a casa en Israel.
En noviembre pasado, BioBee organizó la primera Conferencia Internacional Anual de Subsidiarias, proporcionando un foro único donde los empleados de BioBee de todo el mundo pudieron compartir todos sus desafíos, consejos útiles y soluciones únicas. La conferencia también brindó a muchos de los empleados la oportunidad de ver dónde se concibieron sus fascinantes productos de control integrado de plagas, además de ver el propio Israel por primera vez.
La conferencia reunió a representantes y distribuidores de todo el mundo, incluidos países como Chile, Colombia, India y Rusia. Cada país individual presenta un desafío único para BioBee, enfatizando la importancia de tener una presencia local, con experiencia local. Las filiales ayudan a superar desafíos exclusivos de su localidad, como identificar las rarezas del terreno o amenazas específicas a los cultivos.
La logística de traer insectos depredadores y complicadas herramientas de Manejo Integrado de Plagas a países extranjeros no es una tarea fácil. Para minimizar las molestias, BioBee toma la iniciativa de exportar algunas de sus capacidades de producción al extranjero. La compañía llegó incluso a enviar reinas de abejorros a Chile para iniciar una nueva colonia de Bombus, donde ayudan a polinizar cosechas récord de arándanos y tomates de invernadero. En Colombia, BioBee estableció una instalación para cultivar su ácaro depredador emblemático, el Phytoseiulus persimilis.
Pero lo más importante es que la presencia de BioBee sobre el terreno ayuda a garantizar que los intrincados y complejos sistemas integrados de manejo de plagas se implementen perfectamente. Los representantes de BioBee crean una conexión importante en sus países, aprovechando el conocimiento local mientras enseñan sus métodos revolucionarios, creando un nuevo grupo de expertos sobre el terreno. Este tipo de flexibilidad ha permitido a BioBee ofrecer a cada mercado los mejores productos y servicios posibles mediante la investigación y el desarrollo mediante la implementación en el campo.
En los últimos cinco años se han dado grandes pasos para plantar las semillas del nuevo sistema de filiales. A medida que estas empresas filiales comienzan a echar raíces, esta enorme empresa ha comenzado a dar frutos, permitiendo a BioBee dar el salto de una empresa Israelí a una internacional. La primera conferencia subsidiaria anual se ha convertido en un poderoso símbolo del papel integral que el conocimiento local y la flexibilidad han desempeñado en el enorme éxito de BioBee.