La mosca del olivo (Bactrocera oleae) pone sus huevos en el fruto del olivo realizando una punción con el ovipositor en la corteza de la aceituna. La punción es de color verde oscuro al principio, pero cambia a un color marrón amarillento como resultado de la herida infligida. Una vez que las larvas de la mosca del olivo eclosionan, cavan un túnel en la superficie y luego se adentran más en la fruta, hasta el centro. Las larvas se alimentan del fruto. La mosca del olivo está considerada una plaga grave en el cultivo del olivo.
DAÑO
La oviposición de las hembras así como la alimentación de las larvas son responsables de los daños a los frutos del olivo. Los cortes en la piel de la aceituna debido al ovipositor y las larvas que se alimentan de la pulpa de la aceituna pueden hacer que los frutos de la aceituna se sequen y caigan de los árboles. Además, el daño causado al fruto permite la entrada de organismos patógenos y particularmente hongos. Las aceitunas infestadas pierden por completo su valor comercial para el consumo de mesa y la producción de aceite.
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